Tu vas avoir quatre-vingt-deux ans. Tu as rapetissé de six centimètres, tu ne pèses que quarante-cinq kilos et tu es toujours belle, gracieuse et désirable. Cela fait cinquante-huit ans que nous vivons ensemble et je t'aime plus que jamais. Je porte de nouveau au creux de ma poitrine un vide dévorant que seule comble la chaleur de ton corps contre le mien.
Tras toda una vida de escribir ensayos filosóficos, de defender la ecología política, de batallar con las ideas, Groz lamentaba haber olvidado en sus libros a la persona sin la que no los hubiera escrito. Sin ella, ni más ideas, ni más vida.
2 comentarios:
Dos días antes de morir mi abuelo, en la UVI, mi abuela y él, cogidos de la mano, se miraban fijamente con una sonrisa en los labios que sólo había percibido antes en algunas parejas adolescentes.
Supongo que él pensaba algo así como "porter de noveau" la mirada de ella... después de 70 años juntos.
Quizá esa sea la manera de sobrevivir, saber que en la muerte seremos examinados de amor.
Crucemos los dedos...
Yo los cruzo ya...
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